Audio de la conferencia “Oportunidades y Riesgos de los Medios Digitales”

El pasado miércoles 18 de noviembre se realizó a través de la plataforma Zoom, la conferencia “Oportunidades y Riesgos de los Medios Digitales – Nuestra responsabilidad frente a niños, niñas y jóvenes“, a cargo de la Dra. Claudia McKeen.
A continuación, compartimos el audio completo:
Agradecemos la concurrencia e interés manifestado y anunciamos que en breve publicaremos las respuestas a las consultas realizadas a través del chat durante la misma.
Preguntas y Respuestas de la Conferencia
1. ¿Qué podemos hacer en este tiempo que nos tocó vivir en cuarentena y nuestros niños tienen todavía que llevar sus clases por Internet. El daño está, ¿pero cómo se puede bajar el daño ocasionado?.
Mariela Parian de Lima, Perú.
Durante la conferencia he tratado de mostrar que los niños en el primer septenio aprenden a través de imitación, a través de experiencias con el mundo real. El niño puede establecer su cuerpo como su hogar y desarrollarse sanamente sólo a través del encuentro con la realidad, la naturaleza, los elementos que los mojan, calientan, la vivencia del viento y del clima, la fuerza de la gravedad que los tira hacia abajo cuando saltan y hace que caigan, la cual tienen que superar de alguna manera su cuerpo.
No es lo mismo ver como en una película alguien se moja que mojarse uno mismo en la lluvia. Uno debe experimentarlo por sí mismo, uno mismo debe hacerlo, para que el fenómeno pueda asir nuestra voluntad. ¿Cuál es la diferencia entre moverse y ser movido? … Esto vale para todas las edades, también para nosotros, los adultos, pero especialmente para los primeros años hasta los 9 más o menos, porque se trata ahí de la maduración física y la salud del cuerpo, con el cual vamos a contar durante toda la vida.
En el segundo septenio se trata de la maduración de la vida del alma. En este momento debe ponerse el máximo énfasis en el desarrollo del sentir, en una vida anímica (del alma) sana y variada. También en este caso la maduración sana solo sucede a través de sentimientos reales, cosas vividas por uno mismo.
En el tercer septenio tenemos que acompañar la maduración espiritual. En esta edad, la secundaria, la tarea es estimular en los jóvenes a un pensar propio, independiente. No se trata de adoptar opiniones sino de aprender a formar un juicio propio e independiente. Esta posibilidad recién se va dando cuando el lóbulo frontal va madurando, es decir a partir de los 16 años. Hasta este momento los medios impiden el desarrollo correspondiente a cada etapa de los niños.
El tiempo que se pasa en los medios es prácticamente tiempo perdido para el desarrollo sano físico, anímico y espiritual, que solamente puede darse a través de experiencias en el mundo real.
¿Qué podemos hacer entonces en el tiempo de la pandemia, donde se usan los medios para aprender y se dan clases vía internet, donde los niños o jóvenes no pueden hacer deporte, no pueden encontrarse con otros y por esto quieren pasar muchas horas del día con investigaciones, películas, juegos y en las redes sociales?
No podemos cambiarlo en este momento, pero en casa podemos crear un contrapeso, por ejemplo, buscando generar acuerdos de tiempos libres de medios. Y esto no se logra con prohibiciones sino emprendiendo algo interesante con los niños, ofreciendo a los jóvenes algo alternativo: salir a la naturaleza, caminatas, excursiones, donde uno investiga algo, busca, conocer algo nuevo. Se puede trabajar en el jardín, hacer juegos, manualidades, cocinar, hacer artesanías con diferentes materiales, hasta construir o restaurar muebles.
Hay tiempo para leer juntos, según la edad pueden tener conversaciones. Según la edad se pueden también escribir historias, una novela, una pieza de teatro, inventar algo y leérselo mutuamente. Se puede estudiar una pieza de teatro, tal vez inventar junto con los niños y después representarla… tal vez renovar el apartamento o cambiar los cuartos. Lo mejor sería hacer las cosas junto con otra familia, con otros niños. Podemos invitar a otros niños cuando sus padres están sobrecargados, porque tal vez tienen que trabajar en home-office y no tienen tiempo.
2. y 9. Son dos preguntas acerca del fortalecimiento de la voluntad
2. Desde Colombia quisiera saber cómo fortalecer la voluntad en los adolescentes.
9. De Jerito: ¿cómo se puede fortalecer la voluntad en los adolescentes?
Una voluntad débil hoy día es uno de los problemas más generalizados en todas las edades: ¿Cómo puedo asir la voluntad para que realmente se haga algo, y no quede solo en “quisiera“ o “desearía“? Cada vez como humanidad ganamos más libertad para volvernos independientes y libres, y ya no debemos obedecer a expectativas externas, donde estamos integrados en una sociedad que nos diga lo que es correcto, donde se exige desde afuera lo que tenemos que hacer. Y cada vez se ve con más claridad, que ahora todo depende de la propia voluntad autónoma y que ésta es débil.
Los medios hacen todo lo posible para que nos contentemos con un reemplazo de acciones, para que rellenemos los tiempos y debilitemos cada vez más la voluntad. Cada película que nos cautiva con su contenido y la tensión, que guía nuestras representaciones y sensaciones, cada investigación en internet que nos lleva de una página a la próxima, donde también podemos encontrar algo interesante, aporta a debilitar nuestra voluntad un poco. Cada juego en internet al recompensar inmediatamente me hace sentir exitoso, entonces sigo jugando, porque quiero tener otra vez esa agradable sensación – pero realmente ¿YO QUIERO esto? Todo esto se maneja desde afuera.
La voluntad solamente podemos educarla haciendo algo nosotros mismos. Si hago cosas porque otros dicen, tengo que hacer algo a pesar de que yo en realidad no quiero, no me interesa, eso debilita mi voluntad. Solo lo que me interesa, lo que yo mismo me propongo. tal vez solo porque entiendo que se debe hacer ahora, fortalece la voluntad. Esto es un desafío inmenso para maestros y padres que acompañan a un joven: ¿Cómo puedo incentivar su interés, deseo y voluntad, de modo que participe por sí mismo? La pregunta es, si podemos convertir los contenidos en algo interesante, en preguntas que se relacionen con el mundo y la realidad.
Si podemos ayudarlos a encontrar en éste los ideales por los cuales vale la pena vivir, por los cuales vale la pena hacer un esfuerzo, aprender y hacer algo con ganas. Conseguir esto es mucho más importante que estar sentado en la escuela. En la edad de 14 a 17 años la pauta, la dirección principal debería ser: encontrar tareas con sentido, para las cuales vale la pena vivir, esforzarse. Los jóvenes deberían hacer pasantías para conocer las diferentes áreas de trabajo que hay en la vida. Agricultura, cuidado del medio ambiente, trabajo social en una familia con niños pequeños, en un barrio marginado, un jardín de infantes, cuidado de personas mayores, en una institución de Pedagogía Curativa. La voluntad sólo se encuentra a través del trabajo, del hacer, de cambiar el mundo un poquitito. No a través de reflexionar sobre ello. Y es importante saber, que la voluntad debe educarse especialmente durante el primer septenio. Ahí podemos tomar muchas medidas preventivas. Ahí ponemos la base para toda educación y fuerza de voluntad. El niño pequeño es todo voluntad, todo movimiento, todo entregado al ser activo. Es en esta fase, donde el niño todavía está completamente inconsciente, no quiere conscientemente por sí solo, sino imita – sin embargo vive en completa actividad interior, en completa actividad volitiva, es ahí donde se pone la base para lo que más tarde brinda la posibilidad de fuerza de voluntad, autonomía, responsabilidad, perseverancia y autodisciplina.
3. Si pudieran acercarnos las referencias de las investigaciones a las que
hizo referencia durante la charla.
Paula Suárez
Con gusto, los participantes pueden recibir el link del programa de televisión, del cual se usaron muchas imágenes y donde se indican las fuentes.
4. En un mundo competitivo donde el conocimiento es parte del día a día y en lo que la mayoría de escuelas se enfoca, como hacer si retiro al niño de la escuela al menos hasta que la pandemia pase y los niños logren regresar al sistema escolar, qué hacer?, los dejamos libres de escuela por un par de años?, el sistema es cruel y los dejará de lado …
Andrea Tamayo Cañadas
El aprendizaje de hechos no es un problema, esto los padres lo pueden solucionar perfectamente con homeschooling, de manera que los niños no pierden el contexto. Lo mejor es hacerlo con un grupo de niños que se encuentren en una de las casas y aprendan juntos. Tal vez se puede conseguir entre todos un maestro o turnarse entre los padres. Sería bueno que el maestro de la escuela indique los temas que hay que aprender. Entonces no se forma una importante brecha de conocimiento. Realmente importante para la formación es el arte. Esto debería ser prioritario también en
la casa.
Si los niños durante del tiempo del homeschooling aprenden con intensidad un instrumento y trabajan artísticamente, hacen cursos en pintura, modelado, literatura, se mueven mucho y vivencian muchas cosas en la naturaleza, aprenden cómo son las cosas en el mundo real de las plantas y animales, entonces el tiempo sin atender a la escuela no será una desventaja.
Lo único que puede faltar y que los niños necesitan cuando no van a la escuela es el aprender juntos, en comunidad con otros niños de la misma edad, el entorno social, el contacto con el maestro y el contacto con otros niños, sus amigos; estos son los factores de cuidar.
5. ¿Qué se puede hacer con una joven de 14 años que está en 8vo. Y que es ADICTA al celular y al estar en contacto con sus amigos?… No lo quiere dejar y se enoja muchísimo cuando se trata de imponer que deje las redes sociales…
Ana
En caso de adicción al celular solo ayuda abstinencia – igual como con cualquier droga.
Solo que es más difícil: en el caso de alcohol, cigarrillos, juego, estupefacientes, chocolate se puede pasar por una rehabilitación y evitar la droga. Uno puede acostumbrarse a nuevos hábitos sin la droga. Sin embargo esto solo es válido permanentemente, si después uno se mantiene en estado de abstinencia. Esto es si uno no toma ni una gota de alcohol, no toca más ningún estupefaciente, ningún cigarrillo. De otra manera la recaída es muy probable.
La gran dificultad en el caso de adicción al celular, a internet es que se refiere a los aparatos que hoy son parte de nuestro día a día y que necesitamos. Entonces, si quedamos dependiente de ellos, debemos aprender un manejo nuevo, totalmente consciente. Esto solamente es posible a través de la conciencia, pero difícilmente para jóvenes de 14 años. Con una dependencia en esta edad lo mejor es hacer un acuerdo de tomarse un tiempo prolongado (unas semanas, 2 -3 meses) en la cual aprende manejarse sin celular. En este tiempo se puede hacer un viaje lindo, un campamento juvenil, un paseo de aventura, una estadía en el exterior, o una estadía en una granja, donde comparte el trabajo. Y se hace el acuerdo: durante el día se trabaja, camina, hace canotaje , aprende un idioma – y en la tardecita, algunas horas antes de acostarse, hay una hora, un tiempo limitado, en la cual se puede usar el celular.
El joven necesita desafíos, motivación, vivencias interesantes, trabajo, donde de noche puede ver lo que pudo rendir. Especialmente necesita relaciones humanas cálidas y encuentros interesantes con personas que pueden ser modelo a seguir, que saben dirigirse al idealismo en él, que habita en todos los jóvenes en algún lugar. A partir de la pubertad con frecuencia ya no son los padres quienes pueden educar y ayudar, sino otras personas, adultos, que impresionan al joven por su trabajo, su capacidad, su manera de vivir o simplemente por lo que irradian. Como padres podemos conseguir algo hasta los 14, máximo 16 años. Ahí el tiempo para la educación termina.
6. Si debemos preparar a los niños para que sepan usar el mundo digital. ¿Cómo lo integramos en la Escuela?
Caroline
La mejor preparación para el uso maduro de los medios como adulto es: no utilizar medios en la escuela, sino dar clases vivas, interesantes, artísticas para que los niños y jóvenes puedan devenir personas responsables, conscientes y con una voluntad fuerte que sepan guiarse a sí mismo. En las escuelas se llega a los mejores acuerdos donde hay reglas claras y especialmente donde se prohíbe el celular. Muchísimas investigaciones comprueban esto.
El uso de celulares durante las clases, aunque solo sea en el recreo o en el baño, incluso apagado en la mochila, disminuye la capacidad de poder concentrarse. Aún no tomamos lo suficiente en serio la distracción que provocan las redes sociales. Para proteger la inteligencia de nuestros niños tenemos que organizar escuelas libres de celulares y horarios libres de celulares en casa. Tenemos que tratar de aclarar esto a los padres: si quieren que su niño sea inteligente debe limitar el uso de los medios. Especialmente el uso del celular.
En la escuela podemos probar que, si logramos esto, los niños aprenden más y mejor, que tienen más fantasía, son más creativos, más independientes en el pensar y a la hora de resolver tareas y problemas.
En el Jardín, en los primeros 9 años, para preparar el uso de los medios deben practicarse y cultivarse las capacidades que necesitamos para utilizar los medios de manera fructífera para nuestro trabajo sin sucumbir a ellos.
Esto significa: primero en lo físico debe desarrollarse la riqueza de movimientos, equilibrio, motricidad gruesa, motricidad fina, destreza, control corporal. En el segundo septenio, el segundo paso es amor a la naturaleza, riqueza emocional, fantasía y amor hacia otros seres humanos, hacia encuentros y relacionarse a nivel anímico…Para esto aprendemos en la escuela escribir, leer, calcular, escribir una carta comercial, mucho sobre formas sociales, historia, ciencias naturales etc…
Como tercer paso en secundaria: creatividad, juicios independientes, responsabilidad, autodeterminación, sentido de la verdad en lo espiritual. Esto no se aprende a través de Google-información sino solamente a partir de la propia actividad, de conversaciones, debates con otras personas que están buscando, a partir de trabajar preguntas cuyas respuestas no se encuentran en ningún lugar. En los últimos grados se puede perfectamente utilizar la computadora para buscar ciertos hechos, pero también para mostrar a los jóvenes las grandes ventajas y las limitaciones del medio. Ninguna computadora puede reemplazar el reconocimiento y la comprensión propia de los grandes contextos espirituales. En esta edad los jóvenes entonces pueden entender la diferencia entre adoptar un juicio, re-pensar lo que el otro ha pensado y el pensar, encontrar “uno mismo“.
7. Estamos viendo en el primer septenio niños que no pueden o tienen dificultades para reproducir algunos fonemas, y explicaste que tiene que ver con la imposibilidad de imitar. Pero también estamos viendo niños que tienen una oralidad muy compleja pero igual al lenguaje de dibujitos y películas (en nuestro caso español neutro), o sea lenguaje inadecuado para el contexto sociocultural. ¿Qué sucede en estos casos? ¿Cómo podemos explicar esto?
Andrea Domenech
Para aprender a hablar el niño pequeño necesita seres humanos vivos, que hablan como ejemplo para la imitación. La capacidad de hablar no es innata sino debe ser aprendida a través de la imitación. Recién al aprender a hablar se transforman los órganos que tenemos igual que los animales en órganos para hablar. Quiere decir que los más de 100 músculos diferentes que participan al hablar deben agregar un nuevo funcionamiento y coordinación al funcionamiento controlado por reflejos, respirar, masticar, tragar. Esto no se logra mediante aparatos técnicos, sin un modelo vivo y real.
Y esto toma tiempo. El niño va conquistando fonema por fonema, y hay algunos que son difíciles, que exigen un patrón de movimiento muy complejo.
De esta manera los trastornos de habla pueden tener causas muy variadas. Sin tomar en cuenta los impedimentos orgánicos, podemos observar que los niños viven de manera muy diferente en la imitación, porque sus sentidos son despiertos en diferentes grados. Algunos viven intensamente en los oídos, escuchan las matices más finas, disfrutan rimas, juegos de palabras y los sonidos de las palabras. Otros miran más el movimiento de la boca, la mímica del que habla o perciben más la expresión, el significado, el colorido moral-anímico, el amor, el interés en lo que se dice.
Muchas veces no les permitimos a los niños a aprender a hablar en su tiempo individual.
Los corregimos, los hacemos repetir y practicamos. ( Todo esto debería omitirse totalmente en el período de la adquisición del habla, ya el hablar no debería adquirirse mediante la conciencia y el sentido de lo dicho.)
Si durante el período de adquisición del habla se acercan otras impresiones del habla al niño, por ejemplo de dibujos animados (sea por ver directamente estas películas o sea por imitación de otros niños o personas que hablan de esta manera), entonces para algunos niños es muy interesante y empiezan a imitar ésto y hablan artificialmente en lugar de hablar sanamente.
Los niños experimentan con muchas cosas. A veces también con una extraña manera de articular o de hablar. Entonces depende de la reacción de las personas alrededor si eso queda impregnado y forma un hábito o no. Si lo prohibimos severamente o si nos causa gracia, entonces se vuelve interesante mantenerlo para el niño ya que los niños disfrutan de las reacciones que provocan. Si hacemos caso omiso de tal intento, entonces en general desaparece pronto por sí solo. Lo más importante es nuestro ejemplo, cómo hablamos nosotros mismos en presencia del niño.
Tomemos conciencia nosotros, los adultos: frecuentemente no hablamos del todo claro,
hablamos sin atención o no pronunciamos bien ciertos fonemas. En presencia de los niños es importante que hablemos conscientemente bien, despacio, veraz , melodioso y con claridad.
8. ¿Cómo acompaña la Escuela Waldorf la realidad de que los niños ya en sus casas conocen y usan las pantallas?
Caroline
Lo que dije en cuanto a la pregunta 1. acá es válido de manera invertida. La escuela debe tratar de crear un contrapeso. Frecuentemente no podemos impedir que los niños en sus casas tengan permiso para usar los medios. Especialmente ahora en la época de pandemia todos los niños y jóvenes pasan mucho tiempo frente a la pantalla y con el smartphone.
¿Cómo la escuela puede enfrentar esto? ¿De qué manera hay que cambiar la enseñanza para crear un equilibrio y enfrentar de manera sana el marcado uso de medios en casa?
Propuestas: ningún uso de medios en la escuela (escuelas libre de celular).
Las clases deben alinearse menos en transmisión de conocimientos, contenidos acabados que deben recordarse sino más bien se deben colocar preguntas de manera viva y creativa frente a niños y jóvenes. Preguntas cuyos respuestas tampoco las tiene el mismo maestro, respuestas que tienen que encontrar ellos mismos. Podemos crear grupos en la clase para tratar un problema , para resolver tareas juntos y después ver cuál grupo logra propuestas más originales y creativos. Rudolf Steiner incentiva que cualquier enseñanza debe ser artística. Quiere decir no solo las clases de arte sino cualquier clase debe respirar y no debe limitarse a hablar solo a la cabeza, a la conciencia, sino debe poder sentirse y dirigirse también a la voluntad. Hay que reírse, tener sensaciones, compartir sentimientos y se debe actuar. Ofrecer mucho, mucho arte. Trabajar artísticamente es remedio y prevención a la vez.
En este contexto los niños practican la creatividad, darle forma a algo de manera autónoma y desde su interioridad, a partir de sus propias imágenes, sin incentivo y control externo.
Muchos saludos a todos los oyentes y los mejores deseos para poder vivir estos tiempos difíciles junto a los niños de mejor manera. ¿Será que tendremos que aprender a pensar también la Escuela Waldorf una nueva manera? Mucho más artística, más creativa, más abierta al mundo, más cerca a la vida, más basada en relaciones humanas, intercambio social, espacios vitales creados en comunidad?
Febrero 2021
Dra. Claudia McKeen